Tanto las actividades llevadas a cabo por los cibercriminales como las estrategias de ciertos estados se adaptan fácilmente a un entorno cada vez más conectado, por lo que es crítico que las empresas evolucionen en la protección ante estas amenazas integrando tecnologías, soluciones y estrategias.
Así lo desprende CrowdStrike en la octava edición de su informe Global Threat Report 2022. Donde se resalta un crecimiento del 82 % en las fugas de datos relacionadas con ciberataques de ransomware y dos nuevos grupos de adversarios procedentes de Turquia (Wolf) y Colombia (Ocelot).
Ciberataques dirigidos desde gobiernos
Según se observa en el estudio, los ciberdelincuentes iraníes han adoptado operaciones de información disruptiva utilizando técnicas de ransomware para cifrar redes y filtrar la información obtenida.
Por su parte, desde China emerge la explotación de vulnerabilidades y se perpetran ataques dirigidos especialmente contra dispositivos conectados y servicios como Microsoft Exchange.
Fuente – revistabyte.es